El primer episodio de Dragon Ball Super, la tan esperada serie secuela de Dragon Ball Z de Akira Toriyama, se emitió casi dos décadas después del último episodio de Dragon Ball Z. El público estaba emocionado de ver el regreso de Goku, Gohan, Vegeta y el resto de los grandes héroes de la Tierra mientras se enfrentan a nuevas amenazas que hacen que los enemigos de Dragon Ball Z parezcan entrenamientos. Dragon Ball Super ha ayudado a que la serie insignia de Toriyama siga siendo relevante para toda una nueva generación de fans. Las discusiones de Dragon Ball sobre los momentos más importantes de la franquicia suelen incluir eventos de esta moderna serie secuela. Dicho esto, más grande no siempre se traduce en mejor, y la compulsión de Dragon Ball Super por aumentar constantemente las apuestas a veces lleva a la serie a problemas. Existe un problema creciente con secuelas de legado y nostalgia vacía que apenas es específico de la industria del anime. Sin embargo, Dragon Ball Super ha desarrollado un patrón frustrante en el que la historia se siente más cómoda haciendo referencia a sus mejores éxitos en lugar de correr riesgos genuinos para ayudar a que la franquicia evolucione para mejor. No hay absolutamente nada de malo en los homenajes y los huevos de Pascua, pero debe haber sustancia detrás de ellos. Dragon Ball Super revisita constantemente su pasado de una manera que le roba a la franquicia su mejor futuro.
Se da prioridad a los antiguos villanos sobre las nuevas amenazas. Dragon Ball Z presenta adecuadamente una nueva categoría de villanía del espacio exterior y más allá, mientras que Dragon Ball originalmente se centró en enemigos humanos. Raditz, Frieza, Cell y Buu se sienten completamente originales en sus debuts. Dragon Ball Super comienza bien con Lord Beerus, un Dios de la Destrucción, pero los siguientes enemigos tienen cierto parecido con villanos mejores. Dragon Ball siempre ha tenido una obsesión con Frieza, pero esto realmente se sale de control en Dragon Ball Super, primero con Golden Frieza y más recientemente con Black Frieza. Black Frieza es actualmente el personaje más fuerte del Universo 7 y el público ya está frustrado por otro enfrentamiento inevitable entre Goku, Vegeta y Frieza. Curiosamente, hay ciertos arcos de villanos de Dragon Ball Super que comienzan con un gran potencial, solo para volver a caer en comodidades pasadas. La vendetta de Granolah contra los Saiyans por sus pecados pasados se alinea con las motivaciones de Baby en Dragon Ball GT. Moro, el devorador de planetas, es un enemigo desafiante e impredecible, pero no pasa mucho tiempo hasta que su uso de la magia se asemeja a la de Majin Buu. La búsqueda de Moro por usar las Bolas de Dragón para recuperar su juventud también es idéntica a la de Demon King Piccolo o Lord Slug. La última película de Dragon Ball Super, Super Hero, deja de lado a Goku y Vegeta a favor de Gohan y Piccolo. Este cambio de enfoque es apreciado, pero se siente perezoso verlos una vez más enfrentarse a una versión revivida de Red Ribbon y sus Androides. La película incluso concluye con un enfrentamiento entre Gohan y Cell Max.
A veces, la tendencia de Dragon Ball Super a repetirse ni siquiera pretende ser algo diferente. Dragon Ball Super: Broly básicamente mezcla la versión de Dragon Ball Z del Super Saiyan legendario Broly para que encaje en el canon de la serie. Dragon Ball Super: Broly es la versión definitiva del personaje, pero no necesariamente es mejor que un personaje original. El público todavía está tan emocionado por el regreso de Broly que incluso ha habido un impulso para que otros villanos de películas de Dragon Ball Z, como Cooler y Lord Slug, reciban el mismo tratamiento. Esto es algo divertido de pensar, pero no hay necesidad de que la próxima línea de películas de Dragon Ball Super cubra material antiguo. Se repiten estrategias obsoletas en lugar de ideas originales. Los villanos reciclados son una tendencia molesta, pero aún puede haber mucha emoción detrás del regreso de un enemigo. Dragon Ball Super va más allá de esto y también presenta múltiples tramas y eventos que repiten directamente ideas antiguas, aunque con un impacto más débil. El arco más largo y final de Dragon Ball Super en el anime es la batalla real multiversal, el Torneo del Poder. Los detalles de esta competencia son únicos, pero los torneos no son algo nuevo en Dragon Ball y estos eventos tienen mucho en común con el Torneo del Otro Mundo de Dragon Ball Z. Incluso hay un momento de suspenso durante el Torneo del Poder en el que Vegeta se sacrifica trágicamente por el bien mayor a través de su técnica Explosión Final. Pálido en comparación con su apuesta anterior contra Super Buu, especialmente porque Dragon Ball Super ni siquiera se compromete a eliminar realmente a Vegeta.
Hablando de Vegeta, Dragon Ball Super presenta un gran desarrollo de personaje para el Saiyan, pero es un crecimiento que sigue los pasos de los logros anteriores de Goku. Vegeta viaja al planeta Yardrat para someterse a los rituales de entrenamiento únicos de su gente. Vegeta desarrolla ataques únicos en lugar de copiar directamente las técnicas de Yardratian de Goku, pero todo el arco se siente mal justificado. Habrá problemas mucho mayores en el futuro si Dragon Ball Super decide enviar repentinamente a Gohan o Piccolo al planeta Yardrat para obtener un impulso de poder similar. La gran pelea de Dragon Ball Super contra Goku Black y Zamasu, por emocionante que sea, se basa seriamente en dos estrategias antiguas. Los héroes recurren a la Onda de Contención Demoníaca y a la fusión Potara en Vegito, ninguno de los cuales lleva a la victoria y simplemente se siente manipulativo.
Dragon Ball Super presenta muchos personajes nuevos y poderosos en la mezcla. Sin embargo, la serie secuela también recibe mucha atención por cómo trae de vuelta algunos de los personajes secundarios más celebrados de Dragon Ball Z. Future Trunks, Android 17 y eventualmente Broly regresan a la franquicia y ayudan a los héroes. Hay una emoción temprana en torno a estos personajes, pero también hay una mayor posibilidad de que se desgasten y arruinen lo que los hizo exitosos en primer lugar. Es un riesgo que se puede evitar a través de material fresco y no de situaciones en las que la antigua pandilla vuelve a reunirse. El manga de Dragon Ball Super recientemente intentó subvertir expectativas y probar algo completamente diferente con un nuevo enfoque en Goten y Trunks. Esto se convierte en una aventura de corta duración que se convierte en una nueva versión de Dragon Ball Super: Super Hero. Sin embargo, las hazañas originales de Goten y Trunks todavía recuerdan al tono más ligero del Dragon Ball original. Los intentos de Dragon Ball Super de hacer algo nuevo inevitablemente se convierten en un refrito del pasado.
Dragon Ball GT ya abrazó demasiado el pasado. Dragon Ball Super recibió de inmediato mucha atención positiva simplemente por no ser Dragon Ball GT. La serie secuela de Dragon Ball Z solo en anime tiene una reputación controvertida entre los fanáticos, aunque esa percepción se ha vuelto más positiva con el tiempo debido a la narración torpe de Dragon Ball Super. Dragon Ball GT está fuertemente influenciado por el pasado. Comienza con Goku convertido en niño, como en el Dragon Ball original, y todos los villanos de la serie están conectados con el pasado de la franquicia. El fracaso de Dragon Ball GT debería haber sido una señal para Dragon Ball Super de que necesita hacer algo diferente en lugar de depender de la nostalgia. Dragon Ball Super parece inferior a Dragon Ball GT en varios aspectos, ya que su mirada al pasado se hace para provocar reflexión en el cambio. Esta perspectiva está ausente en Dragon Ball Super y las travesuras de Bulma y Frieza muestran que los deseos de Dragon Ball se han vuelto cada vez más imprudentes.
Los mejores momentos de la franquicia provienen de la interrupción. Dragon Ball Super ocasionalmente encuentra éxito a través de su decisión de revisitar el pasado. La ascensión de Goku a la fuerza del Super Saiyan Blue o la revelación de nuevos Saiyans en el Universo 6 son extremadamente satisfactorias. Dicho esto, estos éxitos palidecen en comparación cuando se trata de los hitos únicos de Dragon Ball Z. Cualquier serie que dure tanto como Dragon Ball alcanza rendimientos decrecientes cada vez que explora material similar. Dragon Ball Super ha encontrado tantas formas de explotar los deseos de Dragon Ball o traer personajes de vuelta a la vida que la muerte …